Regalo de bienvenida
Regalo de bienvenida
Hasta el año 2005 no empecé a descubrir los verdaderos secretos del verdadero y efectivo marketing en Internet. Hasta ese año, utilicé durante un par de años el universal "copia y pega". Y funcionaba, ya lo creo que funcionaba. Unido al desaparecido Windows Messenger, escribía o copiaba un anuncio y empezaba a hacer spam por cada rincón de Internet, y esperaba sólo unos minutos hasta que me empezaban a saltar docenas de mensajes de personas queriendo chatear conmigo para recibir más información.
Grupos de Google, de Yahoo y de MSN eran objetivos perfectos para inundar de publicidad los negocios que promocionaba. Portales de mujeres como enfemenino.com, tablones de anuncios y sitios de búsqueda de empleo, también eran objetivos prioritarios para hacer spam indiscriminadamente. No importaba si eran de viajes o de deportes, de religión o de política, de arquitectos o de fontaneros; mi objetivo era que todo el planeta viera mi anuncio porque consideraba que todo el mundo quiere ganar dinero y era un cliente potencial, y era precisamente lo que yo vendía: ganar dinero desde casa. ¡Qué equivocado estaba! Ahora existen las redes sociales y están infestadas de personas utilizando las mismas técnicas intrusivas que nos ponen de muy mala leche a más de uno. ¡Qué equivocados están!
En aquella época tenía la ambición de alguien de 25 años y me iba a comer el mundo, aunque no llegué ni a lamerlo. Pensaba que "copiar y pegar" era la forma de ganar dinero en Internet, y decidí echarle más machos que nadie. Más de ocho horas copiando y pegando anuncios cada día para renovar los de los días anteriores. Las horas invertidas en "copiar y pegar" eran proporcionales a las horas que tenía que invertir en atender a todas las personas que contestaban a los anuncios. Con un PC de sobremesa lleno de cables y periféricos en una habitación de mi casa, tuve que mover temporalmente un colchón a esa habitación para intentar atender a todo el mundo. Hasta que mi pareja decidió ayudarme y nos turnábamos para dormir por tramos en esa habitación. Inhumano, antisaludable y estúpido. ¡Qué ignorante era!
El dinero fácil sólo existe en la lotería, y tienes más probabilidades de que te caiga un rayo que de tocarte el premio gordo en la lotería.
Aunque parezca increíble, con tanto trabajo no llegué ni a ganar $5000 en un año. Mi plan era sacrificarme copiando y pegando hasta ganar dinero para contratar a una persona que copiase y pegase, y luego a otra y luego a otra. Contratar una legión de "copiadores y pegadores" a sueldo era mi plan de futuro. ¿Pero qué ser humano con un mínimo de inteligencia piensa así? Si no gano dinero ni para mí mismo copiando y pegando, quitándome la vida sin llegar al primer objetivo, ¿cómo lo voy a ganar para pagar a otra persona y alcanzar el segundo objetivo? ¿Y el tercer objetivo? ¿Y el cuarto? Mi capacidad de sacrificio sólo era comparable a mi grado de estupidez.
Así se titulaba mi primer libro: "La fórmula exacta para ganar dinero online". Me costó escribirlo casi dos años influenciado por estas temporales técnicas para "ganar dinero desde casa" o "ganar dinero fácil". Veía que la gente perdía más dinero del que ganaba, y yo empecé a ganar cantidades de dinero más decentes. Desarrollé varias técnicas para enviar de forma semiautomática cientos de anuncios diarios, reduciendo las horas que había que invertir trabajando. Engrané otras técnicas más avanzadas de "guante negro" que me hacían ganar más dinero reduciendo aún más el tiempo.
Creí que las mismas técnicas que me empezaron a funcionar a mí ayudarían a miles de personas que estaban en la misma situación inicial en la que yo me encontré. Y cuando por fin conseguí terminar "La fórmula exacta para ganar dinero online" después de varios años, en menos de un mes dejaron de funcionar esas técnicas. Google las cazó, Twitter obligó a utilizar su API, Facebook cambiaba constantemente sus códigos y los otros grupos se convirtieron en un suicidio para el SEO.
Mis principios me impedían completamente vender algo que dejó de funcionar, así que paralicé inmediatamente la promoción del libro. Casi dos años de trabajo se fueron por donde amargan los pepinos porque pretendí darle a la gente lo que buscaban cientos de miles de personas a diario en Google: ganar dinero rápido, trabajando desde casa un par de horas, y a ser posible pulsando sólo un par de botones mientras se copia y pega anuncios a discrección. Esa es, con total seguridad, la mayor estupidez que pude cometer: derrochar tiempo, dinero, relaciones y energía en algo que no existe.
Ganar dinero en Internet es fácil, igual de fácil que es ganar dinero en un taller si sabes mecánica. Lo único difícil es querer ganar dinero rápido haciendo algo que no sabes hacer. ¿Qué es fácil y qué es difícil?
Existe un camino marcado que necesitas dominar mínimamente para empezar a tener cierto éxito en Internet. O pagas a alguien que lo conozca o pagas para conocerlo tú, pero de alguna forma tienes que pagar. Es un camino que me negué a escribir sobre él porque es un camino aparentemente más lento, y la gente quería las cosas rápido, querían resultados inmediatos, querían ganar dinero en Internet aprendiendo poco e invirtiendo menos aún.
El camino de emprendedor a empresario digital es un camino para dar un paso detrás de otro hacia adelante, no uno hacia adelante y dos hacia atrás, como le sucede a todo el mundo que busca la fórmula para ganar dinero rápido. Lo rápido es lo seguro. Es mucho más largo y costoso perder cada día buscando atajos que simplemente ponerte a andar el camino. Seguro que muy dentro de ti ya lo sabes pero sigues buscando formas de ganar dinero fácil y rápido.
Si pretendes ganar dinero rápido y comerte el mundo sin cocinar, escríbeme y te envío "La fórmula exacta para ganar dinero online" gratis. Pero créeme, es menos frustrante y mucho más emocionante y gratificante alimentar papagayos en un zoo. Si por el contrario, quieres empezar a andar el camino "de emprendedor a empresario digital", lo siguiente es lo que te encontrarás en el viaje y lo que necesitas para emprenderlo:
El camino "de emprendedor a empresario digital" es una ruta de viaje de principio a fin, no es una fórmula exacta para ganar dinero rápido en 100 páginas. Tú serás quien decida si tu vehículo son los deportes extremos o la gastronomía mediterránea, y tú serás quien decida cuándo parar a repostar. Sea cual sea tu pasión, puedes llevarla a Internet y convertirla en un gran negocio de futuro.
Antes de constituir tu propia empresa, necesitas un colchón, necesitas una fuente de ingresos constante para financiar todos los gastos y responsabilidades que conlleva una empresa para no fracasar antes de empezar. Para eso existe este libro, para empezar emprendiendo sin necesitar años aprendiendo cometiendo mis errores.
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